Mientras que un reseller o revendedor adquiere un servicio de hosting y revende planes directamente a sus propios clientes bajo su marca, el afiliado promociona el hosting y cuando uno de sus clientes realiza una compra desde su enlace de afiliado, se lleva una comisión. En el caso de Loading, esta comisión es del 50%.
Como afiliado no eres responsable de la gestión del cliente, pero como reseller sí. En este sentido, como revendedor puedes poner tus propios precios y tener control sobre los planes que ofertas. Pero como afiliado lo único que haces es recomendar. Se trata de algo más sencillo.